Tienes una historia que contar o una idea para vender… y necesitas que otras personas la entiendan y la acepten. Para ello es fundamental que tu presentación sea persuasiva, con un contenido claro y dinámico.

Las presentaciones digitales son muy poderosas.
Pueden generar confianza, ayudar a conectar con tu audiencia, y motivarlos a actuar.

Pero para que esto suceda, hay algunos elementos clave que debes tener en cuenta:

1/ Planifica

Antes de comenzar es fundamental definir qué es lo que queremos comunicar. Identifica los mensajes clave:
¿Qué tipo de información voy a incluir?
¿Cómo voy a organizar esta información?
¿Qué gráficos, iconos ó datos infográficos pueden ayudarme a explicar más claramente lo que quiero comunicar?

2/ Conoce a tu audiencia

¿Sabes a quién te diriges? Ya sea que estés vendiendo una visión, un proyecto o un servicio, es fundamental identificar a tu interlocutor.

De esta manera, puedes descubrir qué le motiva, y así será más fácil crear una conexión personal para llegar a tu cliente o público.

3/ Impacta visualmente

Nunca subestimes el poder de la estética. Tu contenido puede ser muy bueno, pero si la información no destaca, puedes perder la atención de tu audiencia.

Si tienes una identidad visual corporativa definida, aprovéchala. Utiliza la tipografía y colores corporativos para crear un look consistente con tu marca. Esto le dará personalidad a tu presentación, reflejando profesionalismo.
Utiliza imágenes de calidad, y sólo usa fotografías cuando estén relacionadas con lo que comunicas.
Mantén una coherencia visual a lo largo de toda la presentación.

4/ Cuenta una historia

No se puede persuadir sólo mostrando datos.

Las historias ayudan a evocar respuestas emocionales en tu audiencia, logrando así un mayor impacto a los mensajes. Aprovecha el storytelling para contar tu propia historia.

5/ Menos es más

Keep it simple. Focaliza en la idea principal, piensa en una secuencia lógica, y recorta lo que sobra.

Redacta los textos en frases cortas.
Elige fondos neutros, que no afecten la legibilidad de los textos. En lo posible utiliza blancos ó colores claros (los fondos oscuros resultan más pesados para la vista).
Las diapositivas deben hacer un uso efectivo de los espacios blancos: es una manera de atraer la atención hacia lo que realmente importa.

Y recuerda…

El 70% de la comunicación es VISUAL.

¡Tomamos decisiones en segundos fraccionados en base a lo que vemos!

Por eso es importante asegurar que tus presentaciones tengan una comunicación visual sólida que complemente los contenidos y sea altamente efectiva.